El poder de una sonrisa…

Hace ya una semana que dio comienzo en la UA el seminario Desata Tu Potencial impartido por Juan Planes, al que asistí como voluntaria de la asociación.

En el post anterior escribí acerca de los valores que mueven a los voluntarios. Hoy quiero hacer una reflexión sobre la puesta en práctica de algunos conceptos transmitidos por Juan.

Pasada la resaca inicial del “desatamiento global” de todos los voluntarios que compartimos esta experiencia, permanecen en mí dos conceptos que las palabras de Juan me hicieron recordar: el poder que tiene regalar sonrisas y todo lo bueno que recibes cuando vives el día a día, sin enfadarte.

Para mí, esta ha sido una semana especialmente dura de trabajo. Llevo durmiendo una media de cuatro horas desde el seminario y, sin embargo, no me acompaña el cansancio, sino la alegría y la motivación.

El seminario supuso un chute de energía brutal, una energía que se ha mantenido dentro de mí, imperturbable, a lo largo de todos estos días.

¿Esta energía permanece en mí por motivos internos o externos?

Analizo mi semana para ver qué ha ocurrido a lo largo de ella, buscando diferencias con otras semanas anteriores. He impartido formación en varios ámbitos, he realizado sesiones de Coaching a clientes, me he reunido con colaboradores, he realizado visitas comerciales y he disfrutado (poco) de la compañía de amigos…

Al realizar este análisis, tomo consciencia de que, además de que no he hecho nada especialmente diferente de otras semanas de mi vida, el contenido del trabajo en esta ha sido especialmente complicado y he sentido una mayor falta de tiempo que en otras ocasiones, lo que ha provocado, además, que haya dormido menos.

Y sin embargo siento que todo me ha ido mejor. De hecho, los resultados indican que todo ha ido mejor…

Pienso en lo más complicado de esta semana: una reunión comercial para determinar si dar comienzo o no a un proyecto de formación bastante complejo en una organización. No tenía muchas esperanzas, pero en las tres horas de reunión que mantuve en la empresa, no perdí la sonrisa y el enfado no hizo aparición en ningún momento. La asertividad me acompañó durante toda la reunión, una reunión larga en la que tuve que reunirme con bastantes personas que, inicialmente se percibía se desconfianza y cuando se levantaban de la silla lo hacían totalmente relajados.

¿Cuánto tenía que ver mi actitud en ello?

Mi actitud lo ha supuesto todo esta semana. Ha sido una de las semanas más proactivas de mi vida y he tomado consciencia, en cada momento, de la elección que estaba realizando. La elección de mi actitud ante todas las situaciones ha sido la calma sin perder mi sonrisa y he de decir que ¡¡ha funcionado!!

Cierto es que ha habido muchos momentos a lo largo de la semana en que el recuerdo de la “marea verde” actuando como un equipo eficaz y rebosante de alegría y humildad ha provocado en mí esa sonrisa que comento.

La sensación de la experiencia vivida al lado de todos ellos también tiene que ver en mi estado actual, por supuesto!!

Así que, una vez más, quiero darles las gracias a todos desde aquí por aportar momentos mágicos a mi vida. Es un placer veros por Facebook durante el día, porque me recordáis cosas que me aportan energía vital!!

Y desde aquí, os animo a todos a que buceéis en vuestro interior y descubráis todo aquello que os entusiasma, porque desde el entusiasmo llega la motivación y cuando la motivación nos impregna, no nos enfadamos y sonreímos todo el tiempo. En definitiva… ¡somos felices!

¡¡Feliz fin de semana!!

Carolina Hernández