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21 Jun 2012
Jiménez Barbero Mercado San Antón

La clave está en la diferencia…

Mi post de esta semana está inspirado en un cliente…

Mejor dicho, está inspirado en el concepto de diferenciación de uno de mis clientes…

Cuando conocí a Álvaro en uno de mis cursos, descubrí en él a una persona con grandes inquietudes y un enorme poder de iniciativa, todo ello dentro de un sector totalmente tradicional: las carnicerías y las charcuterías.

Trabajar con él en el ámbito de la comunicación online de su negocio supuso conocer con mayor profundidad sus ideas e iniciativas. Las suyas y las de sus hermanos que, juntos, componen la familia Jiménez Barbero.

En su cabeza, la idea siempre estuvo muy clara. Era observable cómo unía dos conceptos que, para mí, cada vez son más necesarios en todas las organizaciones: lo profesional (competencias y aptitudes) y lo emocional (experiencias).

Y aquellas ideas de años atrás, hoy son una realidad: ‘la carne de la felicidad’.

 

Jiménez Barbero ha apostado por diferenciarse del resto de sus competidores en un entorno en el que se continúa trabajando de manera muy tradicional y en el que muchos piensan que no se puede innovar. Pues bien, el hecho de crear toda una filosofía sobre la felicidad asociada a productos cárnicos es, desde mi punto de vista, una excelente manera de innovar.

Y como cualquier innovación bien llevada a cabo, esta filosofía sobre ‘la carne de la felicidad’ no se reduce sólo al producto. Esta filosofía abarca toda la imagen corporativa del negocio y, sobre todo, se puede sentir y observar en sus establecimientos. Todos sus colaboradores poseen una elevada cultura de atención al cliente, con el objetivo de facilitarle las cosas lo máximo posible, en función de sus necesidades y sus gustos concretos. Y esto convierte en un placer ir a comprar a las tiendas de Jiménez Barbero.

Recientemente, la empresa ha abierto un puesto en el recién restaurado Mercado de San Antón de Madrid, sedimentando esa inquietud innovadora que caracteriza a la familia.

Y, en muy poco tiempo, abrirá sus puertas La Finca, un proyecto realizado con todo el cariño del que la familia es capaz y que pretende ser la primera explotación ganadera visitable de España. Allí es donde viven sus bueyes y vacas felices para luego contribuir con el ecosistema y deleitar paladares de a quienes nos gusta saborear una buena carne.

Esta semana he tenido la oportunidad de reencontrarme con Álvaro en Madrid y me ha transmitido esa ilusión y esa pasión por su trabajo, los intangibles que completan un proyecto ambicioso y diferente.

Y es que, en muchos casos, la diferenciación no está en el producto en sí mismo, sino en la forma en que ponemos ese producto en el mercado.

Muchos copiarán sus ideas… algunos, de hecho, ya lo han hecho. Lo que nunca podrán copiar otras organizaciones son los valores que unen a esta familia y que recogen sus colaboradores y que hacen que las cosas que parecían imposibles se conviertan en fáciles.

Es innegable que si buscamos nuestros valores diferenciales, nuestros puntos fuertes de diferenciación, podremos competir de manera saludable en un mercado que, hoy por hoy, lo necesita.

Enhorabuena, Álvaro, por ser como eres…

Enhorabuena también a toda tu familia porque, unidos, estáis consiguiendo convertir un bonito sueño en realidad

Os auguro continuos éxitos y espero poder estar cerca para poder compartirlos!!!

Os invito a todos, desde aquí, a definir qué cosas nos diferencian del resto y son nuestros valores principales. Seguro que hay sorpresas!!!

¡¡Feliz día!!

Carolina Hernández

admin

Mis valores son la flexibilidad, el respeto y la comunicación. Consultora, Formadora y Coach en coaching organizacional, desarrollo de habilidades de dirección y comunicación interpersonal y organizacional. Me entusiasma acompañar en las transformaciones de las personas y las organizaciones a través de la consultoría y la formación.

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